Una niña de 18 meses ha muerto este jueves 11 de
octubre en Chapinería tras ser atropellada por un autobús escolar, provocándole
un traumatismo craneoencefácilo severo que ha hecho que muera en el acto, según
fuentes de Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid.
Los hechos han ocurrido a las 13.48h en el
aparcamiento del colegio instituto Santo Ángel de la Guarda, en la calle de
Rotetas, cuando supuestamente la niña se ha soltado de la mano de un familiar y
ha salido corriendo. El conductor del autobús que no se percató de su presencia
siguió con su maniobra.
Los servicios de emergencia de la Comunidad se han desplazado a la zona,
tras recibir la llamada de aviso a medio día. Sin embargo, ha sido el médico del ambulatorio del pueblo quien ha certificado la muerte instantanea de la menor a causa de un traumatismo craneoencefálico.Los efectivos del SUMMA solo han tenido que firmar el acta de
defunción.Aunque las circunstancias del accidente se están investigando, la Guardia Civil trabaja con la hipótesis de que la pequeña se separó un momento del adulto que la cuidaba y entonces fue arrollada, así lo ha informado la Comandancia de Madrid.
Según ha explicado Amelia López, monitora del colegio Santo Ángel de la Guarda, se trata de una familia de origen magrebí que vive en el pueblo y que tiene al menos dos hijo, la menor fallecida y un niño que está escolarizado en el centro; y este jueves el padre había ido a recoger a su hijo mayor al centro, acompañado de la menor cuando ha ocurrido el accidente.
La monitora ha contado que la fallecida tiene 19 meses y había empezado a andar hace poco. "Estaba muy gordita y se caía mucho; andaba más con la cabeza que con los pies", y cree que la pequeña se pudo caer junto al autobús y por eso el vehículo la arrolló, aunque no ha visto el atropello.
Amelia estaba en el comedor, preparando las mesas, cuando ha oído a una compañera decir: "no puede ser, no puede ser, tiene que ser un simulacro".
Al asomarse a la ventana,ésta vio a un hombre boca abajo, dando golpes contra el suelo y "algo que parecía un muñeco" bajo la rueda del autobús. En el momento se dio cuenta que el hombre era el padre de la niña y que el autobús la había atropellado.
"He salido a sujetar al padre porque yo creí que se mataba, y he pedido
ayuda. Sólo se podía socorrer al padre, porque por la niña ya no se podía hacer
nada", ha explicado Amelia, que ha asegurado que, al ver esa escena, el
autobús tenía que circular hacia adelante cuando ha atropellado a la niña.
Cuando el conductor del autobús se dio cuenta de lo ocurrido, bajó del vehículo
y llamó por teléfono pidiendo ayuda.
El capitán jefe de la Guardia Civil de Getafe, al que compete el pueblo en el que ha ocurrido el suceso, ha explicado que la investigación sobre el mismo acaba de comenzar. Será el Juzgado de Instrucción de Valdemoro el que llevará la causa y decidirá si hay responsabilidad penal por parte del conductor del autobús o no.
El día después del accidente, compañeros del colegio y vecinos de la localidad improvisaron un altar en el lugar de los hechospara recordar a la pequeña fallecida en el accidente.
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